El adecuado estado de higiene de una vivienda es fundamental para garantizar la salud de los inquilinos. Del mismo modo, la limpieza en una comunidades de vecinos es un aspecto importante en la convivencia de las personas que residen en un mismo edificio.
Tanto es así, que el artículo 9 de la Ley de Propiedad Horizontal establece que es obligación de los vecinos mantener los espacios comunes en buen estado.
¿Pueden los vecinos realizar la limpieza de su comunidad?
Hace varias décadas, cuando los bloques tenían muy pocas alturas, los propios residentes se encargaban de limpiar las zonas comunes.
Hoy en día, es impensable que los vecinos se ocupen de acondicionar el portal, las escaleras y demás espacios de paso.
No sólo por el notable aumento en el número de pisos, sino porque los inquilinos cada vez disponen de menos tiempo y al no tratarse de un profesional, puede poner en peligro las viviendas e incluso a los propios vecinos.
La mejor solución en estos casos es recurrir a los servicios de limpieza de una empresa especializada.
Acciones para mantener limpia una comunidad de vecinos
Las tareas que hay que realizar para mantener limpio un bloque de pisos o una urbanización dependen principalmente de varios factores:
- El tamaño del inmueble o recinto.
- Del número de personas que vivan en él.
- La cantidad de zonas comunes y tipo (jardines, piscina, portales).
No todas estas acciones de limpieza de una comunidad de vecinos requieren ni los mismos productos ni maquinarias, ni la misma periodicidad. La frecuencia de estas labores de saneamiento la establecen los propietarios con la empresa contratante.
Aún así, hay algunas pautas de limpieza en edificios que deberían de ejecutarse diariamente o cada semana para mantener unas instalaciones óptimas:
- Barrido y fregado de la entrada al portal, el rellano y los pasillos.
- Limpieza de los ascensores y sus espejos.
- Limpieza de las escaleras, barrido y fregado. En función del tipo de material, habrá que emplear un producto y otro.
- Quitar polvo en pasamanos y manillas de las puertas y buzones.
- Eliminación de suciedad y polvo de otras zonas menos sufridas como son las ventanas de las escaleras y los extintores, u otros elementos decorativos del rellano y el portal.
Tareas esporádicas en la limpieza de comunidades de vecinos
Por otro lado, existen algunas zonas menos transitadas o que necesitan una limpieza con menor frecuencia. Son labores que se pueden realizar cada 15 días o mensualmente.
Entre ellas destacamos las siguientes:
- Limpieza de garajes comunitarios: esta área es de las partes más sucias de cualquier comunidad de vecinos.
- Revisión y limpieza de desagües.
- Limpieza de tapicerías y moquetas en el caso de que el inmueble cuente con este tipo de suelo, o si hay sillones u otro tipo de asientos forrados.
- Limpieza más profunda de los ascensores: carriles de las puertas y fosos.
- Saneamiento de barandillas y pasamanos con productos desinfectantes.
- Limpieza de paredes y alicatados.
- Barrido y fregado de zonas compartidas como la terraza comunitaria, patio de luces o la sala de contadores.
- Limpieza de la zona de piscina y equipamientos deportivos
- Mantenimiento y limpieza de jardines
- Limpieza y mantenimiento de piscinas
Ventajas de contratar a una empresa de limpieza especializada
Los profesionales de la limpieza están acostumbrados a desinfectar y recoger los residuos que se generan en este tipo de instalaciones.
Una empresa de limpieza especializada cuenta con los materiales y máquinas necesarias para unos resultados óptimos y profesionales.
Además de obtener mejores resultados en la higiene del edificio, contratar una empresa de limpieza trae consigo múltiples beneficios frente a recurrir a personas que no sean profesionales del sector.
Solicitar los servicios de un negocio especializado permite que los trámites burocráticos sean más sencillos y transparentes. Pueden, por ejemplo, emitir facturas, algo que un particular no podría hacer.
En el ámbito económico, las cantidades que hay desembolsar suelen ser menores, gracias a la utilización de sistemas de limpieza más rápidos y eficaces que no acostumbran a estar al alcance de un autónomo o una persona física. El precio, normalmente, depende de los metros cuadrados de superficie que tenga la comunidad de vecinos. Asimismo, recurrir a una empresa de este tipo conlleva más garantías, ya que las responsabilidades relativas al desempeño de la actividad corren por su cuenta.
Empresa de limpieza especializada en comunidades de vecinos
Una buena empresa de limpieza en Sevilla ofrece servicios de calidad a precios muy competitivos. Conozca el amplio catálogo de trabajos que efectúan. Realizan un estudio completo de las instalaciones que vayan a ser objeto de las tareas para preparar un presupuesto personalizado.
De igual modo, como expertos en la limpieza de comunidades de vecinos, recomendamos establecer una serie de prioridades para que el operario conozca cuáles son los lugares y labores más importantes para los inquilinos.
Si necesita una empresa de limpieza en Sevilla para su comunidad de vecinos, no lo dude póngase en manos de Limpiezas La Trinidad, profesionales con más de 34 años de experiencia.